Cuando pensamos en una mudanza la primera imagen que nos aparece en la mente son cajas. Empaquetar toda una vida en una vivienda y llevarla a otra. Sin embargo, una mudanza supone una serie de trámites relacionados con contratos, entre ellos, los energéticos. En este artículo te contamos cómo salir airoso de este proceso y aprovechar esta oportunidad para ahorrar dinero en tus facturas.
¿Los suministros no están activos?
Puede ocurrir que al alquilar o comprar una casa o local los anteriores propietarios realizaran el trámite de dar de baja la luz con su comercializadora, ya fuera Endesa, Iberdrola, Repsol, etc. En ese caso, los nuevos residentes tendrán que solicitar el alta de la luz y el gas y pagar un precio por ello. No es inusual esta situación, puesto que todas las empresas energéticas, Endesa, Holaluz, Podo y el resto, ofrecen la posibilidad de dar de baja los suministros por fallecimiento del titular, divorcio de una pareja, alquileres o compraventa de viviendas y locales.
No obstante, antes de solicitar el alta de la luz y el gas, el consumidor tendrá que decidir con qué compañía desea contratar y qué tarifa se adapta mejor a él. En primer lugar, el usuario deberá conocer sus necesidades energéticas, que dependerán en gran medida de: las dimensiones de la vivienda, el número de inquilinos y si su consumo se centra en horas. Este último punto puede significar un gran ahorro, ya que EDP, Naturgy y muchas otras empresas tienen tarifas de luz de discriminación horaria. Es decir, el precio del kWh no se mantiene igual durante todo el día y si los consumidores centran como mínimo el 30% de su consumo durante el periodo más barato, la factura se reducirá notablemente. Para cualquier duda al respecto se puede llamar al teléfono gratuito de EDP, Iberdrola, Endesa… De hecho, a través del teléfono se pueden contratar tarifas o añadir otros servicios ya sea con Holaluz, Naturgy o EDP.
Cuando el consumidor sepa qué modalidad le convence más, tendrá que buscar a la empresa que le ofrezca el precio más bajo. Para no volverse loco en esta tarea, puede hacerlo a través de un comparador de ofertas de luz y gas, indicando sus características se generará una lista con las comercializadoras que ofrecen los importes más bajos.
¿Los suministros están activos?
En resumen, si el nuevo propietario tiene que dar de alta la luz y el gas, primero tendrá que saber qué tarifa le conviene (discriminación horaria, precio del kWh estable, etc) y después contratar y solicitar el alta. Sin embargo, si los suministros están activos los pasos serán diferentes, en concreto estos:
- El nuevo inquilino tendrá que solicitar el cambio de titular de contrato tanto de luz como de gas. Se precisarán los datos personales del antiguo inquilino, por lo tanto, es necesario que ambos titulares (actual y nuevo) se pongan de acuerdo. Es un trámite gratuito y en unos 15 días será efectivo.
- Esta gestión es necesaria porque solo el titular del contrato puede realizar modificaciones como: cambiar de tarifa, cambiar de potencia o de comercializadora.
Además de elegir una tarifa adecuada en la que paguemos justo por lo que consumimos, también es recomendable adoptar una serie de medidas para reducir el consumo energético. En este artículo encontrarás ideas muy interesantes para conseguirlo.